El Protocolo de Estambul es un manual para la investigación y documentación eficaz de la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanas o degradantes. Aprobado por la ONU en 1999, proporciona el primer conjunto de directrices reconocido internacionalmente para los médicos y abogados sobre cómo documentar la tortura, a través de una recogida del testimonio que permita ofrecer un juicio de consistencia sobre dicho relato, así cómo evaluar el impacto médico y psicológico derivado de esa situación de tortura. La incorporación del Protocolo de Estambul en tribunales como prueba es crucial para la documentación y correcta investigación de la tortura, indispensable para garantizar procesos de justicia y reparación.
Este 2022 la segunda revisión del Protocolo de Estambul (PE) ha visto la luz. Concebido en 1999 y revisado 5 años más tarde, en 2004, han tenido que pasar otros 15 años para que se produzca un proceso de actualización y re-visión muy necesario. La interdisciplinariedad, si bien enriquece los procesos, conlleva mayor complejidad y mayor necesidad de aclaración. El nuevo protocolo no es breve: 220 páginas frente a las 78 de la versión de 2004. Por ello, desde el Grupo de Acción Comunitaria, junto al equipo del Centro Sir[a], ofrecemos una formación específica para entender los nuevos elementos, o aquellos que han sido revisados, a partir de 5 sesiones en línea donde se trabajarán los conceptos globales del protocolo, los marcos éticos y las exploraciones médicas, la exploración psicológica y psicométrica y los nuevos desarrollos jurídicos.